Media Maratón de Gijón 04/05/2019

Toda carrera tiene su aquel y su porque. En una de las últimas carreras que hice del reto, coincidí con Chipi. Cuadramos agendas como siempre hacemos y me informó de su intención dé hacer la media de Gijón para seguir con el reto.

Aquí debo explicar que con Chipi comparto una bonita amistad de kilómetros en el reto de las medias. Tanto es así que nos conocimos por ello. Aunque su reto era hacer provincias y el mío se centraba en las capitales de las provincias, ambos teníamos el mismo objetivo.. completar las 52 medias de las provincias de España.

Con los años, me di cuenta que mi reto podía ser inalcanzable, ya que algunas medias de capitales no existían o había ediciones que no se hacían por algún motivo. Total que tenía que ir reemplazando alguna capital por otra ciudad de la provincia. Así el reto pasó a ser el mismo que el de Chipi. Y así surgió Gijón, que no es capital, pero la incorporo al reto.

En los últimos viajes había arrastrado a algunos amigos de Logroño, animados por el énfasis de viajar y correr en sitios nuevos. Así también surgió la amistad con una nueva compañera, Ingrid, miembro de los Beer Runner de Logroño y muy activa últimamente en carreras y viajes runners. Comentando a Ingrid nuestra intención de venir a correr a Gijón, no tardó en apuntarse al viaje con nosotros.

Así, partimos la familia Arroka e Ingrid dispuestos a correr la media maratón de Gijón este fin de semana.

La temperatura era idónea, tuvimos lluvia en el viaje, pero a la llegada había un cielo despejado y un precioso atardecer. Guardábamos un bonito recuerdo de Gijón, de unas vacaciones pasadas por aquí.

Nos hospedabamos en un céntrico hotel que además permitían la presencia de nuestra componente canina Lau. Todo un éxito.

No dudamos en disfrutar de la gastronomía del lugar, y es que en Asturias se come muy bien.

La carrera era el Sabado a las 18:00, que nos permitía viajar con comodidad y poder disfrutar un poco del Sábado noche y salir el domingo temprano.

Se habían inscrito más de 2500 personas, era la media con más inscritos de todo Asturias, y tenia categoría de carrera grande. Esto se notaba en la organización, detalles en la recogida de dorsal, señalización etc..

Minutos antes de la carrera nos encontramos Chipi, Ingrid y yo, dispuestos a salir. Chipi lucia una camiseta de Arroka’s family que le había regalado en este viaje. Y es que nos hace mucha ilusión ver a nuestros amigos vestidos con nuestros colores y es una bonito recuerdo.

Nuestros objetivos eran diferentes, yo había calculado que haría sobre 1h35 según mi actual estado de forma. Habia mejorado notablemente en los últimos entrenos y creía que esto se vería reflejado en la carrera. Ingrid y Chipi, me confirmaron que harían tiempos cercanos a las 2 horas.

Comenzó la carrera. Cielo nublado, temperatura de 18°C grados, perfecto. Salimos en el cajón de 1h35 aunque realmente la organización no había puesto limitaciones en el dorsal, por lo que al final cada uno se ponía donde quería.

Sali conservador, dejando atrás a Ingrid y Chipi, a un ritmo de 5. Pronto me di cuenta que mi cuerpo estaba preparado para dar un pasito a delante, y correr a ritmos más acelerados. Los siguientes kilómetros bajé a 4:10, intentado recuperar esos segundos perdidos de la salida.

Aunque realmente sabía que con ese ritmo no iba cómodo. Así que volví a programar el ritmo hasta que me encontré agusto rodando a 4:20. Ahora si, tocaba disfrutar.

La carrera era prácticamente llana, había un pelín de repecho en el km 11, que ya me había notificado mi compi María Miranda, de Maratón Rioja. Pero nada que mi velocidad de crucero no supiera mantener.

Por el km 9, pasábamos por el puerto, y continuamos bordeando la costa, acercándonos a la playa de poniente atravesando la Plaza Mayor. Sin duda, la parte más bonita de la carrera.

Mi piernas iban solas, sabía que por ritmo iba cerca de la 1h30. Quizás si en ese último tramo hubiera acelerado un poco, hubiera conseguido pasar la barrera de 1h30. Pero quería disfrutar. Nadie me presionaba para hacer un tiempo, así que me deje llevar y que mi cuerpo decidiera a que ritmo debería ir.

Así rodé los últimos kilómetros a 4:25, acercándonos a la meta que era en unas pistas de atletismo, próxima a la salida. Esprinté un poco al llegar a meta para cerciorarme que era real, tenía caja suficiente todavía.

Finalicé la media en un tiempo de 1h31, resultado muy óptimo para mi. Contento por haber disfrutado en cada momento.

Después de recuparme un poco esperé a Ingrid y Chipi que llegaron gloriosamente antes de las 2horas. Y nos abrazamos con gozo.

Oni e iker habían visto la carrera en el centro, pero no se acercaron a meta ya que estaba lejos del hotel. Habían estado presentes en mi cabeza todo el tiempo.

Y una vez terminado, celebramos nuestro glorioso triunfo con otra rica comida asturiana.